miércoles, 22 de julio de 2015

¡Festejando otro cumple!





Para mí organizar cumples de la peque y ser Blogger van de la mano. Los Blogs han sido fuente de inspiración para las recetas y de ese mundo aprendí que yo también podía usar mis manos y hacer cosas que me dejen orgullosa. Aprendí sobre todo a mirar con otros ojos para poder sacar una idea mínima y poder darle mi forma. Básicamente, aprendí a partir de los blogs a usar Pinterest.
Así que si bien casi no tengo fotos para mostrarles (otra vez lo mismo!) les cuento con la ilusión de que les sirva de algo la info.

El tema
Este año para ayudarla a definirse usamos entre las dos Pinterest. Así ella veía el personaje dentro de la dinámica cumpleaños. Eligió Dora La Exploradora. A mí me gustó porque me pareció original pero implicó poder usar muy pocas cosas existentes. Sobre todo fue más complicado para la torta.
En algún Blog leí que lo importante era tomar algunos elementos de la temática y poder usarlos para la decoración. Por otro lado, la experiencia previa me llevaba a obligarme a ser sencilla, a no embarcarme en ideas complicadas. Dora no es de lo más guapa, pero sí bien colorida, así que aproveché eso.
Así que para decorar me inspiré en esta imagen que vi en Pinterest y de ella saqué la idea para pegar las láminas y los globos en la pared:
Fuente http://spaceshipsandlaserbeams.com/blog/2014/07/party-central/10-party-themes-for-boys-we-love

Y luego había visto en varios las guirnaldas de flecos de papel de seda que me encantan. Seguí este instructivo y la verdad que resultó muy fácil.
Fuente: http://alllovelyparty.com/diy-guirnalda-de-flecos/


Con latas de leche pintadas armé estos centros de mesa a los que luego le puse estrellitas hechas con porcelana fría, chupetines y malabiscos. 

Porcelana fría, un camino de ida!

Luego para la mesa puse unas bandejitas de cosas dulces usando granas y grajeas de colores. Un arrollado inspirado en esta idea:
Fuente http://www.bettycrocker.com/how-to/tipslibrary/baking-tips/confetti-cake-roll

Y unos alfajorcitos comprados (tipo Jorgito) y bonobón blancos a los que le puse glasé y les pegué granas de colores. Lamento no tener fotos porque los hice en una patada y quedaron muy lindos.





















La torta la hizo la genia de mi cuñada y a falta de mejor adorno hicimos hacer una maqueta que no resultó lo que esperábamos.


La sorpresita:
Para las bolsas me inspiré en esta idea de Pinterest usando bolsas de varios colores y cintas. Adentro, además de golosinas compradas hicimos un reciclaje colectivo. Resulta que en mi trabajo una vez por semana nos traen una barrita de cereal y un tarrito plástico con frutos secos. Entre toda la oficina empezamos a juntar los tarritos para hacer algo para el cumple y al cabo de un tiempo ya tenía una cantidad industrial! Así que use unos para ponerle galletitas con formas de estrellas que hice yo y al otro, gomitas varias.
Además adentro les puse un yo-yo. Todo personalizado con el sticker de la gran exploradora!!! 

También les dimos una careta de Dora o su mono botas, que saqué de Pinterest.

La cocina.
Como siempre, me gusta cocinar lo más que puedo. Este año opté por hacer menos variedad y en todos los casos hacer la receta doble, de manera de hacerlo más sencillo. Algunas recetas son clásicas y otras fueron nuevas:


Como era 9 de julio, encargué pastelitos que me recordaban a los cumples de mi infancia! 
Y para la torta del jardín hice el bizcochuelo infalible deSolo para mí con esta decoración chanta-efectiva!


En fin, trabajé mucho pero con orden y tranquilidad. Este año no hubo estrés previo ni corridas (gracias Wunderlist, te quiero!) En lo personal me cuesta un poco relajarme en el durante porque son demasiados niños y siempre parece que se están por sacar un brazo mutuamente…. Pero salió todo de primera y la cumpleañera lo disfrutó mucho.
En lo íntimo (que no salga de acá…) debo reconocer que la parte que más disfruto es la previa, la planificación y el armado de todo. Cada año ella puede participar un poco más y eso también me gusta. Para mis adentros estoy esperando la  época en que quiera invitar a unas pocas nenas. Pero en el mientras tanto tratando de disfrutar de los salones de fiestas que por lo menos te aseguran entretenimiento de los chicos y la atención de los adultos.  
PD: le puse link a todo, pero me parece que no funcionan, o sí?

lunes, 6 de julio de 2015

Amparo cumple 6



Mi chiquita hoy cumple 6. Y yo me lleno de una profunda emoción. Me emociona su felicidad infantil contando los días para que llegue esta fecha, ese hormigueo intenso que anoche no la dejaba dormir, la expectativa por la torta, por los regalos, por la fiesta, por el día especial. ¿A qué edad perdemos eso?
Me emociona pensar en esa noche previa a su llegada, en esa mañana en la que nos vimos la cara por primera vez y en cada uno de esos momentos especiales que siguieron y que voy rememorando a medida que pasa el día: avisarle a los abuelos, recibir algunas visitas, mirarla y mirarnos y pensar “¿de dónde salió esta criatura?”, “¿es nuestra?”. En 6 años que llevo maternando nunca me sentí conforme con las palabras que encontré para contar lo que me pasa. Toda frase hecha es poca y a cualquier expresión le falta fuerza para poder abarcar lo que un hijo implica.
Cuando estaba embarazada, mi hermana me dijo que tener un hijo era maravilloso, pero que me preparara porque vida tal como yo la conocía no iba a existir más. Y yo lo pensé, pero sólo en parte. Pensé en que me iba a faltar tiempo, que iba a querer hacer cosas que no iba a poder hacer, que iba a dormir menos. Lo que no podía imaginarme es que a partir de ese 6 de julio iba a ver todo lo que me rodea con otra mirada, desde otro lado completamente distinto. La vara con que mido desde entonces es una totalmente diferente. Es otra unidad de medida, que hasta ese entonces ni conocía. Las prioridades son otras, los intereses son cambiaron.
Muchas cosas quedaron en el camino. Porque no se pueden o porque ya no me interesan. Otras se hacen igual, tal vez con menos frecuencia o de otras maneras. Sin embargo, ¡cuántas cosas me trajo Amparo! Me recordó como se ve el mundo desde los ojos de un niño, y eso va cambiando pero siempre me devuelve a ese tiempo en que uno todavía no se cree todo lo que se cree ahora y conserva el asombro, la imaginación, la mirada inocente. Me enseñó como es aprender, cuando yo creía sabérmelas casi todas: aprender a hablar, aprender a caminar, aprender todo sobre el mundo. Ella va aprendiendo. Y yo aprendí tanto más!
Amparo es mi gran aliada, cómplice y compañera. Ya vendrán los tiempos en que quiera diferenciarse de mí y piense que soy una naba a cuerdas, pero por ahora estoy bien en el ranking y aprovecho mucho este momento para poder compartir con ella cosas de chicos y de grandes. Adoro su compañía.
Amparo nos recibió de familia y nos empujó a redefinirnos como pareja. En este grupo de tres que somos, también tuvimos que aprender y reaprender la relación de a pares.

Hoy
Hoy la veo enorme y admiro a la persona en la que se convierte día a día mi hija. Soy una mamá de esas que no te gustaría tener en el grupo de mamás del colegio porque para mí ella es perfecta. Puedo hablar hasta dormirte de las virtudes de mi nena. Y si me permiten la falta de modestia, siento que como madre no lo estoy haciendo tan mal.
Muchas veces la gente con hijos más grandes me advierte diciendo ya va a llegar el momento en que no te va a dejar hacer esto o no va a hacer lo otro. Puede ser, quién sabe. Yo pienso en cómo es hoy, todo lo que estos 6 años me permiten.
Aquella mañana del 6 de julio del 2009 aprendí que en esto de ser madre todo lo que uno se imagine a futuro es poco e imperfecto con lo cual trato de pensar siempre en qué nos posibilita cada momento. Hoy disfruta de merendar en bares, de cocinar, de leer y que le leamos. Disfruta de la música, de cantar conmigo. Le divierten los juegos de palabras y los juegos de mesa. Hoy gusta de nuestra compañía, de participar en lo que hacemos, sea ayudarlo al papá cuando trabaja en casa o cuando enciende el fuego en la parrilla como a hacer jardinería conmigo o mirar videos los 3 en el sillón. Sin dudas esto va a ir cambiando, qué más da. El tiempo es hoy.
¡Feliz vida reina de mi corazón!


viernes, 26 de junio de 2015

Mis tres tips

Foto de Extraída de Solo para Mí.

Hoy en la sección Tres Tips de Sólo para mí van 3 recomendaciones de esta servidora!
Espero que sean de utilidad a algunas de las tantas lectoras de la gran Marina. Por mi parte estoy feliz como una perdíz!!!!

Mi Hada Blogger
Cuando Marina me invitó a escribir mis tres tips yo estaba tan contenta como cuando a mis sobrinos los invitan a jugar al básquet de otra categoría. Un poco es eso, yo soy una Blogger hedonista , una ama de casa con wi-fi, una persona con ganas de escribir y mostrar pero que no aplica nada de lo aprendido profesionalmente para el armado de contenidos. Este es mi espacio libre. Y para mí Marina es todo lo contrario con un Blog hermoso, unas fotos super cuidadas pero a su vez con toda su calidez y cierta proximidad que te hace inmediatamente sentir empatía hacia su mundo.
Además, como ya conté alguna vez, Marina fue la primera seguidora de mi Blog y en noviembre del 2011 fue la primer persona en dejarme un comentario en El Castigo de Adán y Eva. Por ese entonces ella tenía en su Blog una sección que se llamaba Soy Blogger que en parte me animó mucho a iniciar mi espacio.  
Desde entonces creo que no hay entrada que me haya perdido de Solo Para Mí, porque me encanta! Hice muchas de sus recetas, jugué con sus juegos de colores como un desafío a mi capacidad decorativa y fotográfica, aprendí que una mesa también se puede poner linda aún con pocas cosas o con algunas impensadas y tejí con ella en el #tejidosoloparami. Me engancha mucho la onda de Marina, a quien no conozco personalmente, pero admiro y aprecio mucho.

Los tres tips

Mi suegra en una época escuchaba un programa de Radio con Teté Custarot que tenía una sección llamada “Los Zapatos en el freezer” y siempre daban ciertos tips (no sé si sigue estando) que ella anotaba en una libreta y me los iba comentando. Así aprendimos a sacar varias manchas y que poner los zapatos que te aprietan en el freezer puede ser una alternativa para estirarlos un poco.
Así que cuando comenzó esta sección de los viernes me entusiasmé enseguida. Obviamente que hay algunas cosas que me gusta saberlas pero que por los usos y costumbres de la casa no puse o no pondría en práctica, pero hay algunas otras que incorporé o que están en lista:




(pongo los links así porque si no la plantilla de Blogger no me los toma bien)

Espero que les sirvan los tres tips y mil gracias Marine por permitirme jugar un día en las grandes ligas! Gracias por tu generosidad y por tener siempre palabras lindas para mi espacio

lunes, 15 de junio de 2015

Estuve en penitencia

(Antes que nada, gracias infinitas por todas las palabras que me dejaron en el post anterior, significaron mucho para mí, el proceso está en marcha)

Ahora, sí, a lo que iba. A principios de este año ordenando muebles, encontré un bolso con una manta abandonada y un montón de lana. Sí, ahí estaba la manta que empecé a hacer para mi hija antes de mudarme, es decir, hace dos años. En el medio me quedé sin uno de los colores, tuve que reemplazarlo y reformular el proyecto. Pero siempre retomaba y surgía otra cosa y ahí quedaba abandonada. Así que cuando me reencontré con el bolso dije hasta que no termine con esto, no compro más lana. Me puse en penitencia.

Hasta ahí tenía unos 10 cuadrados y no sabía bien hasta dónde quería llegar. Pero seguí tejiendo, me llevé la manta de vacaciones, la traje al trabajo para tejer en los almuerzos, fue conmigo a la sala de espera de los médicos y tomó mucho sol por las tardes de los domingos. 

En abril Marina de Solo para mí armó un Club de tejido virtual y yo me "anoté" con la manta. Definí que quería llegar a 24 cuadrados y fui mostrando mis avances como para comprometerme con la finalización del proyecto. Pueden verlo en Instagram con el Hashtag #lamantaeterna

Este fin de semana la manta llegó a su fin!!!! con bordes y todo. Estoy conforme con el resultado aunque si la volviera a hacer no le pondría verde. 

Ya terminada la penitencia me puse a terminar unas pantuflas que tenía para la peque en curso. Estas pantuflas fueron un "permitido" en medio de la penitencia: cuando estaba de vacaciones compré esta lana pura con la idea de hacerme unas pantuflas para mí. Viste que una se lo pasa armando tableros en Pinterest, coleccionando patrones, comprando revistas. Bueno, a mí se me ocurrió empezar con las pantuflas en una cabaña sin Internet, así que tuve que ponerme creativa. 
Las pantuflas salieron bastante bien, solo que cuando estaba haciendo la planta me di cuenta de que eran pocos puntos para mí, así que se transformaron en unas pantuflas para mi hija, que seguramente las use más que yo, ya que adora andar en medias y esto es más o menos lo mismo. En las vacaciones había llegado hasta el tobillo pero como me sobró lana se las hice más tipo botita para que no se tiente tanto a andar en patas. No son la gran cosa pero estoy orgullosa de mi patrón inventado! 


Y ahora empezando a probar con los chalecos de Mamy a la Obra.La idea es hacer el canesú en crochet y el resto a dos agujas.... veremos si llego a terminarlo antes de que nazca la beba destinataria.
 
Y ustedes, ¿andan tejiendo algo? Como digo siempre, el tejido es terapéutico. A mí me encanta sentarme al sol y tejer en silencio. Mi mente vuela, me despeja un montón. 
Besos!!!

lunes, 8 de junio de 2015

Matrimonio por conveniencia

Hace 3 años cambié de trabajo. Y no fue la primera vez. Ni mucho menos. 
En estos años de vida laboral he ido dando algunos saltos, tomando direcciones que me llevaran a otra parte que me sirviera más. 
Mi concepto es claro: trabajo para vivir y no al revés. Elegí una profesión que amo y el objetivo es encontrar un trabajo que me permita vivir lo mejor posible en los términos más mercantilistas que te puedas imaginar, pero que me permita ejercer la profesión, es decir, amalgamar lo profesional y lo personal. 
Esos cambios siembre fueron en función de lo que mi vida requería en ese momento. Al inicio fueron trabajos de pocas horas que sirvieran para ayudar a mis viejos a solventar mi carrera; luego trabajos que me permitieron ganar experiencia, sin preocuparme tanto por el ingreso; ya cerca de los 30 me permití hacer algunas piruetas divertidas (como trabajar en una radio) y ya de cara a formar una familia busqué espacios más estables, con proyección. Pero la ecuación de fondo siempre es la misma.

El último cambio
El último viraje que hice fue procurando trabajar menos horas (son  siete horas y media, todavía quisiera que fueron un poco menos), con un buen ingreso, pasando de un perfil de comunicadora generalista a focalizarme en el ámbito de lo digital. Debo ser sincera y decir que en ese momento nosotros estábamos encarando de lleno el tema de la casa y el tema de los ingresos ranqueaba alto. Paralelamente para esa época mi hija había definido que la siesta era cosas de bebé y complicaba el esquema que tenía en ese momento (maternal por la mañana + teletrabajo por la tarde), lo cual hizo imperioso que yo encontrara la alternativa laboral para poder reducir la carga de laburo que en ese momento era de 9/10 horas. En lo profesional dejaba un puesto en el que había dado mucho de mí durante 6 años y me fui con una despedida que me hizo saber que se me iba a extrañar. 
Fue difícil, muy difícil y soy consciente de que la parte profesional en ese momento era lo que menos me cerraba y aún así decidí arriesgarme pensando que yo le iba a poder dar forma, iba a poder correrme hacia un lugar de crecimiento y desafío. Me mentí a mi misma.

Tres años después 
Lo cierto es que la empresa resultó estable como creía y bastante bien rentada para lo que es el mercado. Pero el área digital que yo tenía que desarrollar nunca encontró lugar en la planificación de la gerencia y yo tampoco lo pude/lo supe impulsar demasiado. Así que las horas de oficina se combinaron en bastante tiempo ocioso (de lecturas varias, entre ellas de blogs) y tareas muy operativas de atención a usuarios. Soy una comunicadora en un universo de informáticos (o cabezas de teclas, como ellos se autodenominan), el componente tache lo que no corresponda de este grupo.
Como se imaginaran toda esta situación ha merecido más de un desvelo, muchas charlas con mis jefes y más de un debate interno. Más de una vez me he planteado volver a cambiar de trabajo y me da mucho vértigo. A veces creo que el trabajo perfecto no existe, al menos para mí que soy por naturaleza bastante inconforme. Hoy sé que no podría emprender nada por mi cuenta porque no me bancaría la incertidumbre, no estoy preparada ni piscológica ni materialmente para dar un salto sin red.
Pero tengo que saber bien qué quiero

Entonces qué hacer
Aprendí muchas cosas en este tiempo
- Aprendí que quejarse todo el tiempo no es bueno para nadie. Si uno se cansa de la perorata constante, imaginen los demás. Y dentro del universo de los demás incluyo a mis compañeros, a mi jefe y también a mi no-marido que se la fumó en pipa muchas veces como un lord. Pero principalmente nadar en el propio mar de mierda de los lamentos te termina corroiendo el ánimo de una manera interminable. Entonces, trato de reemplazar ese quejido constante por dosis de catársis inevitables y concretas. Trato de indetificar los enojos y limitarlos a problemas identificables. No me quiero enojar por todo pero tampoco estoy forrada en teflón.
- Reconocer que no todo es malo: hace poco más de un año me ofrecieron otro trabajo que no tenía las cosas buenas que tiene este (especialmente el horario) y a la hora de escuchar la oferta me aferré a esos beneficios como cuestiones innegociables. Si pude hacerlo en ese momento por qué no puedo hacerlo en la diaria y apreciar las cosas buenas. Si no negociaría esas condiciones porque las considero ganadas, por qué no las disfruto. Mi matrimonio con esta empresa es por conveniencia. Pero yo quiero sumarle un poco de pasión.
- Hace poco desde la vecina orilla, se arrancó el blog Intensional. Y allí me topé con los 4 pasos para alcanzar tu propósito. Y me convencí de la idea de poder escribir de manera sistemática lo que busco y lo que me molesta. Comencé haciendo una lista con las cuestiones que me hacen bien de mi trabajo y las que me hacen mal. Y a continuación sacando flechitas para poder potenciar las primeras y minimizar las segundas. El desafío es poder escribir mi propósito, ver a dónde quiero ir en este camino y que voy a hacer para lograrlo. Hace poco la empresa nos convocó para participar de un proceso de autoconocimiento (es decir, una consultora te ayuda a analzar tu carrera, identificar fortalezas y debilidades acorde a las competencias determinadas por la empresa, y analziar tu proyección) y de ahí salió - entre otras cosas - que no tenía capacidad de proyectarme laboralmente en el largo plazo, lo mío siempre es el contexto inmediato.
Así que en eso estoy, en tratar de escribir para salir adelante, sabiendo qué cosas puedo y quiero cambiar y cuáles no. Me espera un proceso largo y tedioso pero ya estoy viendo frutos, especialmente en mi ánimo y eso me motiva a seguir adelante.
Seguramente en algún momento vuelva por acá con algún avance. Pero soy de procesos largos....

Lecturas

Florencia Ferramondo's books

Mil soles espléndidos
it was amazing
adoré este libro. Me la pasé hablando de él. Tal es así que se lo hice leer a varias personas. Es el primer libro que leo del autor y también de una historia situada en Afganistán. Triste, conmovedor, durísimo pero hermoso. Trenzando his...

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