jueves, 8 de noviembre de 2018

Viaje al Norte | Parte 4 | Cachi y ciuda de Salta


En nuestra noche número 6 del viaje, paramos en Cachi Adentro, a unos 7 km del pueblo, en las Cabañas Miralunas, que tienen además una bodega artesanal. Tanto las cabañas como el paisaje son super recomendables. En lugar muy tranquilo, bien cuidado y con cabañas amplias y super equipadas. También la atención es muy buena y el vino delicioso. Cenamos ahí mismo ya que si realizás un pedido a un par de horas antes te lo llevan a la cabaña. Lo mismo con el desayuno.
Al día siguiente aproveché para hacer la visita a la bodega que me resultó muy interesante. En época de vendimia podés alojarte en las cabañas y además ser parte de la recolección de las uvas y del inicio de la elaboración del vino. Las cabañas están literalmente entre medio de las hileras de vides, con lo cual debe ser una época muy linda.

Miralunas - Cachi


Ese día aprovechamos lo que quedaba de la mañana para recorrer Cachi. Anduvimos por la plaza y recorriendo algunas de sus callecitas que hoy por hoy están mucho más transitadas que el Cachi que yo conocí tiempo atrás. De todos modos sigue siendo un pueblito lindo, con mucha oferta gastronómica para almorzar rico, lugares de artesanías y con sus frentes bien cuidados como para sacar lindas fotos.

Cabildo de Cachi


Y luego de almorzar partimos para Salta, por el hermoso camino del Parque Nacional Los Cardones y la cuesta del obispo. Attenti que el Parque Nacional no tiene demasiada atención ni cartelización alguna. Hay un punto para sacar buenas fotos con una dársena amplia para estacionar. Nosotros no paramos creyendo que seguramente más adelante habría otros y fue un error.

Dos días en la ciudad de Salta
En Salta nos alojamos en los alrededores, en la zona de San Lorenzo, distante a unos 20 minutos de Salta Capital. San Lorenzo es una zona residencial muy linda, con casas de fin de semana antiguas y muy bonitas. Ahí paramos en un hotel llamado Hotel Torrontés. Si bien el hotel es muy lindo, no me convenció la atención (parecía un hotel fantasma) pero, tras hacerle llegar mis comentarios, ya los dueños me explicaron luego que fue una situación excepcional. Anduvimos esa tarde por la zona de la Quebrada del río San Lorenzo que no vale demasiado la pena y cenamos por la zona.

El castillo - San Lorenzo


Al día siguiente salimos para el centro. Fue bastante duro encontrarse con una ciudad tan activa después de tantos días recorriendo pequeños pueblitos. En Salta fuimos al Cabildo que tiene una muestra histórica a la que quizás le hace falta un rediseño. Me encantó el último patio con una muestra de carruajes. Después fuimos al Museo de Güemes que en verdad es un recorrido virtual (el museo es muy nuevo) por su vida en la que fuera su casa natal. Es muy interesante especialmente para los más chicos. Por ahí es medio solitario el recorrido que se hace en grupos pero sin guías, con lo cual no hay chances de preguntar pero vale la pena. El recorrido dura una hora.


Salta - Cabildo


Almorzamos en Doña Salta, que es un clásico no solo por su comida y su música, sino por la atención que es impecable. No se pierdan las empanadas de charqui.
A la tarde fuimos al Museo Antropológico de Alta Montaña, que alberga en su interior a los niños de Lluillaco con todo su ajuar. Es impactante y sin dudas vale la pena visitarlo. Las momias van rotando por cuestiones de preservación, siempre hay una sola exhibida. Pero toda la explicación del ajuar, del rito y del trabajo del museo hacen que sea una visita super interesente. Es decir si bien el museo es conocido por los niños momificados, si no querés acceder a esa sala, podés recorrer todo lo demás y es atrapante. El museo está muy bien puesto. Nos habrá tomado unos 45 minutos.
La tarde la dedicamos al Cerro San Bernardo al que se sube en auto desde Salta son unos 15 minutos. Con Amparo dimos una vuelta el el telesférico. Hay una buena vista de Salta pero se puede prescindir de la visita.



Y ya al caer la tarde fuimos a conocer la calle Balcarce, mítica por sus bares y peñas. Nosotros fuimos super temprano a tomar una cerveza y recién estaban sacando las mesas afuera, pero parece que se pone todas las noches.

Salta fue la única ciudad grande que hicimos en nuestro viaje para comprobar que somos turistas de pueblitos definitivamente. Nos impactó el aire de opulencia que tiene esta ciudad de grandes iglesias. Nosotros somos anticlericales al 100% por lo cual casi ni nos asomamos a las iglesias y catedrales pero ediliciamente son impactantes. Teníamos todavía fresquito el recuerdo de la rústica sencillez de Catamarca y La Rioja y creo que eso fue lo que nos impactó por contraste cuando nos enfrentamos al frente barroco de la Iglesia de San Francisco. De todos modos es una linda ciudad para visitar y con una buena oferta gastronómica y de música que nosotros no aprovechamos y esta vez no por cuestiones ideológicas sino por esta hermosa criatura de 9 añitos que se duerme en la mesa.

Iglesia de San Francisco, Salta


Me queda la última entrega para compartir con la frutilla del postre: Jujuy. Y prometo que ya me calmo con el Norte!


2 comentarios:

  1. Que hermoso post!!!!
    Yo estuve en Salta en 2008, y algo que me quedó pendiente visitar fue Cachi. Me quedé con las ganas en ese viaje, a la vez que Iruya. Son dos lugares a los que espero ir algún día..
    Si, el turismo de pueblitos es de lo mejor!!! Yo acabo de publicar algunos post de mi viaje por Perú, los últimos de algunas ruinas dentro del Valle Sagrado, muy bonito de ver. El de hoy hablo de Urubamba, si entras a ver las fotos vas a ver que es un pueblito bien pequeño, tanto que sus callecitas son en su mayoría tan estrechas que los únicos vehículos que pueden pasar son unos mini taxis de lo más pintorescos..
    A mi la ciudad de Salta me gustó mucho. Recuerdo con cariño la zona de San Lorenzo, y también el centro. El Museo de Alta Montaña es muy bueno!!! Cuando yo fui la que estaba expuesta era la doncella, y me había sorprendido que hasta se le notaban los pelitos en los brazos, daba la total impresión de una persona que simplemente estaba allí dormida.. Que barbaro! Luego de tantos años, ese estado de conservación!! Me impresionó mucho!
    Con mi marido estamos pensando que el norte argentino podría ser un buen destino para las próximas vacaciones (él no conoce), así que estas recomendaciones me vienen barbaro.
    beso

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    Respuestas
    1. AVisame si llegas a necesitar algún otro dato que con gusto puedo compartirlo.
      A nosotros nos quedó también Iruya fuera del circuito. Quedará para otra vez!

      Eliminar

Cada nuevo comentario que llega me motiva a seguir con este espacio. Gracias por pasar!

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